Diez años es mucha diferencia, pero cuando el deseo se siente en el mínimo roce, entonces es inevitable fingir que hay estabilidad entre ambos, más cuando los ojos son su propio enemigo. La "nena" ya tiene veinte años, pero él se sigue tapando la cara con ambas manos, sin querer aceptar que en realidad es la mujer que muy en el fondo se muere por probar. 🎀🎀🎀🎀🎀🎀 Besitos en la cola, bebettes 🎀💋