•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°• -. ¡La princesa Zenith ha sido secuestrada! -. ¿¡Qué?! •°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°• -. Toma mi mano y te convertiras en mi hija .- La niña vio al hombre frente a ella con ojos llenos de esperanza. •°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°• -. Ojala ser una verdadera princesa y que todos me amaran de verdad y no me vieran como un remplazo... .- Penso para si misma la joven mientras abrazaba el libro que habia terminado de leer. -. Señorita Penélope .- Un mayordomo ya de edad avanzada entro a la habitacion sin siquiera tocar la puerta -. Su Gracia el Duque le pide que se dirija al jardín ya mismo. •°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°• -. ¡He traido de regreso a la hija desparecida del duque Yvonne Eckhart! .- Exclamo el hombre con mascara de conejo. Todos en el salón tenian su vista en el hombre de blanco que afirmaba haber traido a la verdadera hija del duque que nadie vio como la persona quien se suponia era la protagonista de esta celebracion dejaba caer la copa en su mano haciendose añicos en el suelo y manchando su hermoso vestido. •°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°• -. ¡Princesa! .- -. ¡Penélope! .- -. ¡Hermana! .- Todos en el lugar miraron asombrados como Penélope se desmayaba cayendo al frio suelo. °•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•° -. Analizamos la sangre de la princesa y encontramos que tiene desendecia Obeliana...