Yulia y Lena comienzan a tener problemas en su relación luego de algunos años de convivencia. La rutina, la poca intimidad y el estrés del rol de maternidad empezó a afectarlas. Y el hecho de que la condición de Lena se haya agravado, sumó más peso a la balanza.
Un tratamiento milagroso que hace que la pelirroja evolucione en una frecuencia distinta a la morena. Mientras una mejora, la otra se hunde en sus inseguridades. Lena ya no es la chica dependiente, lo cual hace a Yulia caer en una espiral de desesperación. Usa el alcohol como válvula de escape, lo cual le costará su relación.
Se separan a la fuerza por ese hecho, la historia de amor de estas chicas llegó a su fin. Lena se siente herida y busca alejarse, mientras que Yulia hará lo necesario para reconquistar a su amor. Contra todo pronóstico, ella necesita ser perdonada.
-Por favor Lena, no me dejes. Perdóname, arreglemos las cosas -dijo la morena arrodillándose a la pelirroja.
-Lo siento Yulia -dijo con voz quebrada- Lo que tuvimos se acabó, tú te encargaste de dañarlo. Este es el adiós.
-No creo en las despedidas, Lena. Sé que me equivoqué y no me voy a justificar. Voy a luchar por ti y los voy a recuperar.
¿Lena perdonará a Yulia?
¿Podrá su amor superar el obstáculo de la traición?