Los caminos de la vida varían mucho, desde una pacífica educación en una linda escuela hasta el caos y desastre de un capricho lleno de locura. Pensaste que podías tomar la decisión correcta sin causar un problema a los problemas, pensaste que tu corazón ya era tan frío como el de un pedazo flotante de hielo en el Antártico, pero ese hielo con facilidad se puede disolver en un instante con la persona correcta... Y quien pensaría que el chico peli-morado sería ese fuego de fogata que te tornaria en un charco de agua.