La eterna primavera de los no muertos

¡ZOMBIES EN MEDELLÍN!

Tal vez lo anterior parece imposible, pues las películas casi siempre muestran epidemias de muertos vivientes en países del Hemisferio Norte: Estados Unidos, Japón, Inglaterra... con la particularidad de que los protagonistas se salvan porque consiguen hacerse a un helicóptero o un vehículo pesado para poder escapar y lo cuentan como una hazaña casi imposible para alguien que no esté entrenado.

¡Ja! Déjenme contarles que en un sitio rodeado de montañas sí que hay dificultades para lograrlo, y que a los parroquianos del Norte le falta "cañaña". Por eso el punto en común de esas películas es que mayormente sobreviven soldados y los demás siempre la terminan embarrando cuando un no muerto se les pone en frente.

Después de tener que acabar con la vida de su propia hermana, Margarita emprende la gran tarea de enfrentar un brote zombie, justo como pasa en sus videojuegos favoritos. Afortunadamente no estará sola, ya que se verá obligada a presenciar el desastre junto con varios amigos suyos que tienen habilidades bastante curiosas y le ayudarán a encontrar la causa de aquel fenómeno, porque de algo están completamente seguros: solo tendrán oportunidad de averiguar el chisme completo, pues escapar es lo último que podrán hacer en la Ciudad de la Eterna Primavera.

Historia participante del Open Novella Contest en su versión 2024 con el disparador #108.