Ji-yoon es una joven decidida, coqueta y algunos dirían que un poquito narcisista y caprichosa. Pero sshh, no se lo digas a su padre o tendrás problemas con él (y no creo que quieras lidiar con ello).
Acostumbrada como estaba a tener todo lo que quería, Ji-roon llega a su tercer año de universidad, estando a punto de cumplir 21 años y ser proclamada la digna sucesora del negocio de su padre. Pero no, ella no tiene interés en heredar el negocio de su padre, sus ojos (y algo más) se centra únicamente en una cosa: Minjun; un joven doctorando que está cursando su primer año como doctor y ayudante de profesor en su misma universidad.
A pesar de todos sus esfuerzos por llamar la atención del joven, algo parece no salir bien, porque, por algún motivo que ella no logra entender ¡él no le presta ni la más mínima atención! Pero, cabezota como era, Ji-yoon va a buscar la manera de hacer que él se enamore de ella, aunque tenga que recurrir a técnicas poco...ortodoxas...
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...