Gustavo Cerati y Zeta Bosio, unos jóvenes que se conocieron en la universidad y se unieron por su amor por la música, buscan empezar una nueva banda de rock, algo que no era muy común en su país natal, Argentina. Sin embargo, algo faltaba. Gustavo tocaba la guitarra y tenía una voz increíble y Zeta tocaba el bajo, pero necesitaban a un baterista. Entonces apareció Charly Alberti. Charly era el novio de la hermana de Gustavo, Laura Cerati. Charly insistió en tocar para Gustavo y Zeta, y logró convencer a estos de que su talento era suficiente como para que él ingresara en la banda. Y así se formó la nueva banda que sería conocido como Los Estereotipos. Tocaron bajo ese nombre por un tiempo hasta que el nombre les dejo de gustar. Mezclando diferentes palabras, a Charly se le ocurrió el nombre Soda Stereo. Y así nace la banda más importante para el rock argentino. Sin embargo, el camino al éxito no venía lleno de florecitas, más bien era cruel. O al menos era así para Charly. Zeta y Gustavo lo excluían ya que la única razón por la que lo añadieron al grupo fue para tener un baterista. Cuando Soda Stereo se gana un premio, solo un par de meses después de su debut, Zeta, en el escenario, le pide a Gustavo que sea su novio, ignorando completamente la presencia de Charly. Gustavo dice que sí ya que él no gustaba mucho de Charly; él opinaba que Charly era una molestia y pensaba quería excluírlo lo más posible; sentía que en cualquier momento Charly podría quitarle a Zeta. Esto deja a Charly devastado; no se siente importante. Sin embargo, el tiempo pasa y las cosas cambian...más o menos. Gustavo empieza a mirar a Charly y como los fans lo ignoran. Y muy pronto, comienza a sentirse diferente sobre Charly. ¿Gustavo se mantendrá fiel a Zeta? ¿O hará una movida con Charly?