"Good Boy", dirigida por el joven Viljar Bøe, es una propuesta cinematográfica peculiar proveniente de las tierras nórdicas. Esta película se destaca por su inusual combinación de comedia negra, romance y elementos psicopáticos, creando una experiencia que, durante su visionado, lleva al espectador a cuestionarse sobre el proceso creativo detrás de esta obra. A medida que la historia avanza, el aparente caos narrativo comienza a tomar una forma más coherente dentro de su contexto único, un logro que no pasa desapercibido.
La trama sigue a Christian, un heredero de una considerable fortuna, y a Sigrid, una estudiante, cuyo encuentro se da a través de Tinder. Lo que inicialmente parece ser una relación común toma un giro inesperado cuando Sigrid descubre que el perro de Christian es en realidad un hombre disfrazado que actúa como tal. A pesar de la sorpresa inicial, Sigrid decide continuar con la relación, aceptando esta realidad tan inusual.
La película explora esta situación tan atípica, que, aunque pueda existir en la realidad, no deja de ser extraña. La narrativa transita entre la comedia inquietante y el romance, un género poco habitual en las preferencias de los aficionados al terror más gráfico, pero que se integra bien en el desarrollo de la trama. A medida que los personajes y el público se acostumbran a la situación, la historia introduce un giro hacia la tensión, aumentando gradualmente hasta un clímax emocionalmente intenso.
Esta segunda parte intenta narrar los hechos que pudieron haber sucedido luego
(Esto es un fanfiction, así que la originalidad de la trama y sus derechos artísticos van a la productora de la película)