Para Elise White, hija de un reconocido Marqués, su destino estaba mas que definido: desposarse con aquel que le brindase una vida llena de comodidades, sin importar si hay un sentimiento romántico de por medio.¿Pero era realmente lo que anhelaba? ¿Su vida solo se limitaria a ello? Se cuestiona mientras su melena violeta es acariciada por el tenue viento en medio de una melancolica melodia, mientras cae de un balcón y es sujetada con fuerza por los brazos de Demetrius Alexander, el conde que sin imaginarlo, la hará sentir un sinfin de emociones y pensar que quizás, solo quizás, hay algo más tras este jardin sin flores.
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...