-¡Es inconcebible!- exclamó el primero. -¡Impensable!- continuó a la par el segundo. Porque dos idiotas, narcisistas, egocéntricos y sociopatas buscaban su propio placer al meter las narices donde no les llaman. Y debido a que solo puede haber un ganador, compiten para saber quien portará ese título. sin entender que ya perdieron su cordura. Entre más suben de nivel los juegos, más sangre es apostada y pérdida, todo por un solo objetivo. No seria difícil para ninguno, si el otro no fuera un maldito experto en los juegos y los cambios repentinos de reglas...All Rights Reserved