Chuuya siempre podía contar con Dazai, y Dazai siempre podía contar con Chuuya. A lo largo de su vida, Dazai tuvo varios compañeros y amigos, pero entre todos ellos, el que mejor conocía era Chuuya. Además de siempre saber dónde estaba, qué hacía, qué pensaba y poder adivinar sus movimientos, era porque era su compañero. Chuuya, por otro lado, tuvo muchos amigos pero solo un compañero...
Un día, Chuuya simplemente desapareció y Dazai no pudo encontrarlo sin importar cuánto lo buscara. Fue entonces cuando Chuuya tuvo un nuevo compañero.
(Esta historia es %100 soukoku)