Regina creyó que tenía el matrimonio perfecto durante estos doce años de su vida, el marido perfecto que todas desearían tener, amoroso, buen padre, buen esposo, y claro un buen amante, pero cuando el hambre empieza a gruñir las tripas se da cuenta que algo en esa mirada que tanto la miraba con amor no era la misma.
-¡Porque me haces esto! Los niños, no puedes pensar en ellos.
-Lo siento, estoy cansado de esta monotonía-dijo el siendo seco con ella. -Además Margot...
-¡Suficiente! No quiero que la menciones en esta casa, vete, vete con ella, pero no olvides que una vez que cruces esa puerta no regresaras más.
-Regina...
-Me estas abandonando. -el solo tomo su maleta y se fue.
Sarah a sido golpeada por el que ella pensaba ser el hombre de su vida.
Steven fue abandonado por la madre de su niña de tan solo très meses.
Después de haber sufrido en el amor tendrán suficiente valor para enamorarse de nuevo?