"Cruel y despiadado", aquellos eran unos de los calificativos que Rin utilizaba para describir a su cuñado. Desde que llego a la casa de su hermana, luego de cinco años sin verla, descubrió que la vida que Kagura tanto pregonaba no era más que una falsa. Su esposo no era el hombre atento que solía decirle por llamada, todo lo contrario, era un hombre frío que no perdía oportunidad para llenarla de desplantes. Pero, Sesshomaru Taisho, parecía ocultar algo mucho más grave, porque cuando las luces de la mansión se apagaban, él iba a su habitación y le mostraba su otra cara...
Ella no sabía que Sesshomaru quería algo más que un trato de negocios...
Doce meses antes su matrimonio era perfecto... Entonces Sesshomaru Taisho volvió
a casa y descubrió que su mujer se había marchado. Ahora Sesshomaru quería recuperar a Kagome y estaba dispuesto a cualquier cosa para conseguirlo, así que la contrató como ayudante.
La bella Kagome Higurashi creía que su esposo era un mentiroso que la había
traicionado. Ella aceptó el trabajo, pero esa vez no iba a jugar limpio...