Los imperios sanguinarios que derribaron mi sagrado templo verΓ‘n a sus pies los escombros de sus poderΓos a cortesΓa de mis artimaΓ±as. Por cada gota salada, una gota de hierro.
ππππππγ £En el medio de la peor noche, ellos se conocieron.
Γl la necesitaba, y ella no tenΓa otra opciΓ³n, tenΓa que ayudarlo.
Junto con armas, cadΓ‘veres, sangre y carros, ellos se enamoraron. Mingi no lo planeΓ³, pero ella se convirtiΓ³ en su reina, la reina de su reino.