Aquel sentimiento de amor fugaz pero constante que inspiró al prófugo a continuar con su travesía sin esperar nada de nadie, con ahínco de que aquellas palabras que perduran en el pasado y presentes de éstos individuos se vuelvan a repetir pero ahora sí, con ánimo y esperanza de alargarse en el tiempo, de mientras nuestro romance ha de quedar ahí, presente.