Desconocer la realidad muchas veces no es tan malo, la tristeza comienza cuando poco a poco vas teniendo el conocimiento de la misma. Es allí donde las dificultades empiezan, pero lo mágico de este dilema, conocer o desconocer, radica justamente en esa misma realidad. Conocer te permite ayudar, orientar y en últimas salvar. Desconocer, simplemente te hace uno más del montón.Tous Droits Réservés