Todo el mundo mágico conoce a Harry Potter. No hay niño que no haya pedido que le contarán su historia antes de dormir, no hay mago que no haya brindado con sus amigos por el niño que vivió, no hay rincón en donde no se haya escuchado su nombre.
Sin embargo hay un nombre que jamás se escuchó y una historia de la que pocos saben, y es que en la cuna del famoso Harry Potter latía, además, otro corazón, el de su melliza: Hanna Potter.
Hanna era una niña traviesa y con un terrible afán por desobedecer las reglas, pero era una niña como todos los demás niños en el orfanato Lefevre, o eso creía...
Porque ni la misma Hanna conocía su historia, no sabía quién era ni de dónde venía, mucho menos sabía el secreto que escondía aquella curiosa cicatriz en forma de rayo que tenía en el lado izquierdo del cuello.
El que no conoce su historia está condenado a repetirla, por eso hoy te cuento la verdadera historia, o mejor dicho, la historia completa, la historia de Hanna Potter, la niña que vivió.