a beomgyu nada parecía importarle, ni siquiera el bienestar propio. a él no le importaba lo que las personas hablaran de él, o cómo le miraran cuando caminaba por la calle, ni siquiera le importaba poder acabar asesinado en cualquier noche tranquila. desaparecer de un día para otro no era algo que tuviera peso sobre él. pero sobre mí lo tenía. y yo, inconscientemente, comencé a preocuparme por él más de lo que quizás debía. 𝗦𝗘𝗣𝟭𝟵𝟮𝟯 © 𝗸𝗸𝘂𝗹𝗯𝗲𝗼𝗿𝗮