Soy muggle, o eso creía, mi familia había sido Squid desde hace 3 generaciones, cuando el primer Squid nació, fue desheredado y desterrado del mundo mágico, quien fue mi abuelo, mi padre también fue Squid, no le importaba, podía vivir una vida tranquila. después nací yo, igual sería Squid pero yo si nací con magia, y para mí desgracia y la de mi familia, somos los únicos que quedan en la línea de sucesión, y al era la única con mana, no tenía opción, bueno si tengo, pero hay que aprovecharé que tengo dinero ahora.
Fue bastante malo de haber tenido magia, antes de que entre al colegio mi abuelo había fallecido y un año después fue mi padre, y para ese entonces recién iba a cumplir díez años, en lacual llegaría mi carta de Hogwarts, me dolió bastante sus partidas, y como no tenía familiares, y el ministerio apenas se había enterado de mi existencia. Debía sobrevivir sola a este mundo, no me desagradaba la idea, me fascinaba, comencé mi vida de nuevo, ahora siendo maga.
Aunque me hubiera fascinado, que me dijeran que ser lord, si lord, sería también tener muchos compromisos. Los rechazaba, algunos insistían, y eran de las familias más raras, en mi punto de vista.