Han pasado diez años desde el matrimonio de Carina Deluca y Maya Bishop. Cualquiera podría decir que tienen la vida perfecta; Maya como Capitana de la Estación 19 y Carina como directora de su propio centro de investigación en el Greys-Sloan Memorial. Su hija Francesca es la luz de sus ojos, una niña tan inteligente como traviesa, cuya necesidad de ayudar a los demás llevará a sus madres a replantearse el futuro entero.