¿Que pasa cuando tu crush es la típica alfa que se cree mejor que los demás?, demasiado básico, ¿no lo crees?
Bueno, éste era el caso de Abril, Una chica introvertida, demasiado diría yo. La cuál se la pasaba enamorada de Samantha Rivera o como muchos la conocen, Rivers.
Pero no solo era Abril, sino de la mayoría de las omegas de su universidad. Rivers era la típica Alfa narcisista y arrogante que se la pasaba todo el tiempo saliendo con omegas.
Pero no todo es malo sobre Samantha, también hay puntos a su favor. Es la mejor jugadora de fútbol de su escuela y la más atractiva de las alfas del lugar.
Tal vez sea eso lo que la convierte en una de las personas más populares de su escuela.
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.