Él es la persona más despreocupada del mundo. Ella la que tiene demasiadas responsabilidades. ¿Qué pasaría si te dijeran que a veces las personas más diferentes entre sí también son las más compatibles entre ellas? Como hasta el más estúpido de los encuentros pueden llegar a desencadenar una serie de sucesos que pueden poner la vida de dos personas patas arriba. Evelyn Lara es una joven que necesita dos trabajos para poder llegar a fin de mes, y que no se relaciona con nadie que no sea de su ámbito de trabajo. Axel Soto es un médico a punto de empezar su residencia, que también pertenece a la familia real por parte de la familia de su madre, y que le encanta vivir el momento cada día de su vida. Cuando Axel se ve en el aprieto de tener que conseguir una pareja formal que presentarle a su abuela, la desesperación le hace recurrir a Evelyn para poder tener un pacto que pueda ser beneficioso para ambos: fingir ser una pareja, a cambio de ayudarla con algunas de sus facturas imposibles de pagar. Pero, ya sabéis lo que dicen: cuidado con jugar con fuego, porque te puedes quemar. Y ellos parecían estar empapados con gasolina desde el momento en que hicieron su trato.