~para Ti~(Monster Mediator Nauseaxe_404 X
  • Reads 8,190
  • Votes 541
  • Parts 9
  • Reads 8,190
  • Votes 541
  • Parts 9
Ongoing, First published Apr 06, 2024
Tú es por ti me haces vivir me haces gemir me haces amar me haces morir No puedo vivir sin ti ~

Estabas buscando alguna fuente de trabajo ya que tu vida ha sido una ruina sin padres ni a nadie que le importe un carajo lo que te pase. Las cosas han cambiado cuando decides pasar la noche en un hotel de aspecto deteriorado. Sin embargo, el problema es que no está dirigido a humanos, sino a "monstruos". Cierto monstruo o tal vez un humano te llamó la atención, se convirtió en tu acosador personal y muy yandere para ti. Era del color rojo y negro, parecía un repartidor delirante pero siniestro y sosteniendo un hacha para calmarse. A menos que te enamores de él o trates de entender por qué te quiere ~

Todos los derechos reservados
All Rights Reserved
Sign up to add ~para Ti~(Monster Mediator Nauseaxe_404 X to your library and receive updates
or
#5visual
Content Guidelines
You may also like
You may also like
Slide 1 of 10
Bajo tu Dominio  cover
one shots pr cover
Sangre y Poder. cover
MIA // Freenbecky(G!P) cover
Possessive cover
Comics y Imágenes De Catnap x Dogday En Español. cover
EL IMPERIO DEL DRAGÓN cover
𝐄𝐱𝐜𝐞𝐬𝐨𝐬 |Ivan Guzmán| cover
Peligrosa atracción  cover
Oscuro deseo  cover

Bajo tu Dominio

73 parts Ongoing

No la buscaba a ella, ni siquiera me parecía importante su jodida existencia. Pero la vi. Y eso lo jodió todo. La primera vez que vi a Anastasia, no fue una elección. Fue una coincidencia. Una de esas que se clavan en la piel y te carcomen la cabeza. No era especial. No era alguien que mereciera mi atención. Y, sin embargo, en cuanto la miré, no pude dejar de hacerlo. Me obsesioné. Como un puto animal en busca de presa, la seguí con los ojos, con el pensamiento, con cada maldito resquicio de mi conciencia. No había razón lógica. No había un propósito más allá del deseo irracional de verla temblar. Anastasia no lo sabía, pero ya era mía. Y cuando finalmente la tuve frente a mí, cuando supe que no podría escapar, entendí algo: no era solo deseo. No era solo obsesión. Era el placer retorcido de poseer algo que nunca debí tocar.