Con las secuelas del ataque de los necromos aun cicatrizando, solo queda una cosa por hacer: terminar de sanar. Más responsabilidades le esperan al Rey Selatrop. Ahora adulto y con su rol asumido, está decidido a velar no por uno, sino por los que ahora son sus dos pueblos, lo que incluye cientos de miles de niños mágicos integrándose a una cultura devota a su bosque. Por suerte, no estará solo, ya que la última decisión que les ha permitido este hito en la historia del mundo de los doce, fue consentida por su nueva Reina, con quien comparte un vínculo cada vez más sólido, más allá del deseo de dos jóvenes enamorados. Y mientras la consolidación de su romance está al punto de traer más de una no muy grata consecuencia, para sus vidas, su reino, y para un planeta entero, los nuevos monarcas solo desean disfrutar de su momento de regocijo, mientras dure. Ya que, para dos aventureros como ellos, la paz no será para siempre.