Prim Elsher ha crecido con Stanley y Lottie, su hermana, en el idílico pueblo de Willowbrook a las afueras de Londres. A pesar de haber compartido innumerables momentos juntos, Stan siempre ha guardado un secreto profundo: está enamorado en secreto de Prim. Sin embargo, su amor no correspondido lo ha llevado a mantenerse distante, incluso antagonista en ocasiones, con Prim. Para Stan, hablar con Prim o mantener la calma en su presencia se convierte en un desafío abrumador, ya que la vergüenza y el temor al rechazo lo paralizan.
Lo que Stan no sabe es que Prim también ha estado enamorada de él desde que eran pequeños. Aunque Prim nunca ha tenido el coraje de revelar sus sentimientos, su amor por Stan ha sido una constante en su vida, moldeando su visión del mundo y sus sueños para el futuro.
A medida que crecen, Prim comienza a notar la extraña actitud de Stan hacia ella, sin comprender del todo su motivo. Sin embargo, a pesar de los desencuentros y malentendidos, una conexión profunda y palpable se va desarrollando entre ellos, desafiando las barreras que Stan ha erigido para proteger su corazón. En medio de la belleza rural de Willowbrook, Prim y Stan se embarcan en un viaje emocional lleno de descubrimientos, desafíos y, finalmente, el reconocimiento de un amor que siempre ha estado presente, esperando ser revelado."
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.