En las profundidades de la antigua biblioteca, el Necronomicón yace en silencio. Sus páginas, amarillentas y desgastadas, susurran secretos prohibidos a aquellos lo suficientemente valientes (o insensatos) para hojearlo. La tinta, oscura como la medianoche, parece latir con vida propia.
Las runas grabadas en la cubierta parecen arder con una energía ancestral. El título, "Necronomicón", está inscrito en caracteres retorcidos que parecen moverse cuando los miras. Los ojos del lector se encuentran con los de una criatura inhumana, atrapada en la portada. ¿Es un demonio? ¿Un antiguo dios? Nadie lo sabe con certeza.
Las ilustraciones internas son aún más perturbadoras. Monstruos tentaculares emergen de las sombras, devorando almas incautas. Hechizos prohibidos se despliegan en páginas manchadas de sangre. El lector siente que está siendo observado, que algo acecha en las esquinas de su visión periférica.
El Necronomicón no es solo un libro; es una puerta a dimensiones olvidadas, una llave para liberar horrores indescriptibles. Quienes se aventuran demasiado lejos en sus páginas a menudo se pierden en la locura o desaparecen por completo.
Así que, querido lector, ten cuidado. No todos los conocimientos deben ser desvelados. Algunas verdades son demasiado terribles para contemplarlas. El Necronomicón espera, paciente, en su rincón oscuro. ¿Te atreverás a abrirlo?
Tras la muerte de su padre, Kirsen Edevane se esfuerza por recuperar las riendas de su vida. Sin embargo, la llegada de siete nuevos y misteriosos alumnos al Instituto Reems convertirá su intento por recomponerse de las heridas del pasado en una misión imposible.
Porque Isaac, Thais, Elías, Kilian, Cyre, Aran y Shad, mejor conocidos como los Seven, han llegado por una única razón. Y cuando Kirsen la descubre, ya es demasiado tarde para escapar.
Y quizá también para sobrevivir.
-FANTASÍA URBANA Y ROMANCE.
-NO ES POLIAMOR.