Un martes de diciembre Chiara Oliver camina felizmente bajo las luces navideñas que adornan las calles de Barcelona cuando se percata de algo que capta totalmente su atención. Se trata de una chica subida a una escalera tratando de colocar una guirnalda de luces en el letrero de una tienda de carcasas. Su mirada no puede separarse de ese pantalón ajustado cuando de pronto, la chica pelirroja cae de la escalera directamente en sus brazos. Y el resto son historias por contar.