Veronica, una niña de trece años, enfrenta una vida llena de adversidades, incluida una estancia en un reformatorio y la pérdida de su hermano Victor. Cuando su madre la expulsa de casa, Veronica busca refugio en la casa de su mejor amiga, Martina. Allí, debe lidiar con sentimientos complicados hacia Martin, el hermano gemelo de Martina, por quien ha sentido afecto desde hace tiempo. Aunque Martina asegura que el interés es mutuo, Veronica se muestra incrédula y temerosa de sufrir más decepciones. Mientras se adapta a su nueva situación, Veronica promete a su difunto hermano encontrar la felicidad, pero su transición se ve complicada por las tensiones familiares y emocionales en su nuevo entorno. A lo largo de la historia, se va acercando a Selenne, y gradualmente considera a la familia de Martina como un posible nuevo hogar. A través de desafíos y revelaciones, Veronica explora temas de resiliencia, amistad y amor juvenil, mientras intenta superar sus traumas pasados y abrazar un futuro incierto pero esperanzador. Este relato combina la lucha por superar el dolor con el crecimiento personal y el descubrimiento en medio de circunstancias difíciles.