El omega de Beomgyu se habia presentado de manera inesperada a temprana edad, cuando el ni siquiera sabía que significaba, y lamentablemente lo habia aprendido de la peor forma. Cuando Gyu llego a nuestras vidas era apenas un muñeco roto, por lo que poco poco habíamos juntado las piezas y pensamos firmemente que podriamos arreglarlo, porque hariamos todo por él. Eramos adictos aunque nos lo negaramos y solo nos quedaba esconderlo como un secreto, nuestro secreto. ------------------All Rights Reserved
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