No llora, ni sangra... solo mata.
Gabimaru, apodado por muchos como "el vacío", vuelve a caminar entre los vivos en las montañas del Japón de inicios del siglo XX. Vaga sin rumbo en una tierra que esta manchada de sangre, aún tras la caída del shogun, hay un sinnúmero de muertes a pesar de que no hay guerras, y los rumores de la existencia de criaturas que no son de este plano terrenal se esparcen como moscas al viento. En plena era Taisho, el que una vez fue el shinobi más temido de todos, emerge de los suelos y camina por la tierra en búsqueda de venganza, sin embargo, es rescatado por un chico llamado Tanjiro, que lo acoge en su casa, a cambio, le ayuda en lo que puede, viviendo en paz y tranquilidad. Sin embargo, al escuchar el rumor de que un demonio acechaba en el bosque, sale a cazarlo y más tarde, regresa victorioso, pero al entrar a la humilde morada, descubre que el chico y su familia fue brutalmente asesinada por un Oni, esto lo devasta hasta llevarlo a la desesperación y el deseo de venganza que había dejado atrás. Ahora, sin nada más que perder, Gabimaru emprende un viaje como cazador de demonios en búsqueda del hombre o el monstruo que destruyó su vida, pero no estará solo, nuevos amistades que surgen de la tragedia y la ira lo acompañaran en su violenta odisea.