Kokonoi estaba enamorado de su mejor amigo Inui. A Inui claro que le gustaba Kokonoi. Cuándo todo parecía estar bien entre ellos, las inseguridades del rubio los alejaban cada vez más. -Akane esta muerta, Inupi. -Tú siempre me verás como su remplazo Koko. Cansado de la situación y cayendo en la desesperación, Koko había decidido dejarse llevar aquella noche. -Olvidemonos de ellos por esta noche, Hajime. Ambos compañeros de trabajo ignorarian esa noche el peso de esa frase, Kakucho y Kokonoi desconocían lo que la soledad puede llegar a provocar cuando después de tanto tiempo habían encontrado lo que les faltaba para ser felices. Alguien en quien confiar.