Silvana vive sola, tiene novio y ama la rutina. Tiene control sobre su vida hasta que el senegalés Malik se muda al depto contiguo. Ella descubrirá que la vida sexual de Malik es muy activa y los ruidos no la dejarán en paz.
Entre estas páginas digitales se esconden susurros prohibidos, relatos ardientes que me han confiado almas anónimas. Historias eróticas +18, capturadas tal como me las contaron, sin filtros ni adornos, directas desde los labios o las letras de quienes las vivieron. Cada palabra conserva el calor de su origen, un mosaico de deseos que ahora te invito a explorar, con la promesa de que lo íntimo, lo crudo y lo apasionado te espera en cada línea.