La voluntad de su acero, la cristalización de su corazón y por sus venas el fuego, la forja de su mente creando un arma bajo la inquisición maldita de las tempestades astrales. Su brillo se óxido en algún momento y sin miramiento no aparto la mirada ante los peligros y aquellos que la sufren. Ignorando la agonizante existencia de su acero maldito...