¿Verdad o reto? Una pregunta peligrosa. Aunque no para Kara. No. Esa noche no es ella la que corre peligro. De hecho, ella lo está disfrutando. No tiene nada que ocultar, así que aun cuando la pregunta vaya dirigida a ella no tendrá problema en elegir ninguna de las dos. No importa lo que pregunten o lo que la reten a hacer. Envalentonada gracias al alcohol está dispuesta a hacer cualquier cosa. Pero, la boca de la botella no la eligió a ella. Así que puede beber de su cerveza con tranquilidad y relajarse mientras el pobre sentenciado escucha la pregunta de su verdugo. Ella está a salvo y puede relajarse. O eso es lo que cree.