Niebla Encantada

Para muchos la niebla es solamente algo que nos ciega, no de forma literal. Aunque esta niebla si, la niebla encantada.

Parece ser una cosa hermosa, su color rosa pastel la hace ver como algo que te bendice cada vez que la sientes. Parece tener vida propia para atraer cosas buenas, cuando en realidad, es todo lo contrario.

Se encuentra en el Bosque Laberinto, hasta llegar a Enchanté, los habitantes de ese pueblo corren cada vez que la ven, aún preguntándose qué hay dentro, solo saben que nunca deben de estar en ella.

Personas que se han hecho valientes y han entrado ahí, nunca más vuelven a salir. Niños, niñas, adultos y hasta ancianos desaparecen al presenciarla.

Personas que desean ya no estar en este mundo lo único que hacen es dirigirse a la hermosa muerte rosa.

Familiares gritan al ver a su otro pariente siendo devorado por la muerta rosa.
Cuando ella se va, ya no queda nada del que murió. Dolorosamente, nadie puede rescatarlo.

Gritos de dolor se escuchan en el pueblo, cuando una vez a la semana, aparece este temor. Sin tener la oportunidad de despedirse de sus familiares.

Tener un problema ya es grande, imagínate tener que correr una vez a la semana para salvarte.

La única mujer que parece entender a la niebla como una persona más, es ella. Sus ojos grises tienen la misma esencia que uno siente al ver la niebla. No sabes que sientes o padeces, es algo hermoso. Como cuando ves a alguien tan importante en tu vida, así se siente ver la niebla para aquellas personas empáticas.

La única mujer que se ha mudado ahí, después de décadas es Camille Cambridge, una exploradora británica. La cual, adora lo extraño y todo lo que tenga que ver con el peligro.
Y su asustadizo acompañante Jonathan de la Rosa, un explorador español.

Acompáñalos a sus aventuras en otros mundos y también puede que en otros tiempos...