Dogday siempre había tenido un interes particular en el gato, desafortunadamente para él, eso no era recíproco, lo intentó una y otra vez, hablando, jugando, intentando ser menos inquieto a su alrededor pero nada funcionaba, y después de ser testigo de lo que le hacian a los dentro de su hogar... ¿Cómo podían pensar que no haría nada? ¿Cómo podría dejar pasar la oportunidad de hacer un mundo mejor al lado de su dios?
------------------------------------------------------
Catnap siempre pensó que tenía la peor suerte del mundo, aunque de todos sus compañeros solo uno lo sacaba de quicio, era su olor y lo que causaba a los demás, puede que la nariz de un pollo o un elefante no pudieran detectarlo pero como felino podía ser un poco más instintivo. Dogday era todo un caso, tenía un don del que se podía aprovechar y afectaba a las demás criaturas sonrientes.
Y al final tenía razón.
_______________________________________________________
Hey!
Cambio de roles, Catnap como Dogday, y viceversa aunque cambiaremos algunas cositas porque el gato favorito de todos no se dejará arrancar las piernas tan fácilmente.
En cuanto a Dogday, quiere algo y no pudo conseguirlo, así que un poco de humo para despertar a todos no hará daño! Los hará jugar hasta que sus pies sangren y el estará feliz.