Aprendiz ©

“—¿Aceptas? —preguntó cruzándose de brazos.

Él creía que podía controlarla, creía que aceptaría su propuesta. Estaba equivocado, o eso, era lo que yo pensaba. Mi padre era el más buscado entre los narcotraficantes y había cometido un error, lo que buscaba era esconderme de la consecuencia. Sabía que estar con Kenton no sería buena idea, pero era lo que en ese momento tenía como oportunidad.

—Acepto —dije refunfuñando rudamente.

Por su boca apareció una sonrisa perturbadora.

—Bien, comienzas a las 8 —dijo—. Novicia.

Sujete mi mandíbula y mis puños hasta que se largara de mi lado; eso hizo, pero no del todo...”