Mitch Rapp, de 21 años, uno de los mejores agentes de CRUEL, junto con su compañera, Teresa Agnes, de 23 años. Siempre ha sido el mejor en su trabajo, tenía a la mejor prometida que podía haber soñado. Hasta que todo cambió. Y su vida dio un giro. Evan Cameron Parker, de 22 años, hijo de uno de los traficantes de armas y terrorista más buscado y famoso de Inglaterra. Todo iba bien, ayudaba a su padre igual que su hermana, Katherine Parker, de 20 años. Hasta que se vio atrapado en un aprieto con la CIA qué sabe qué más. Solo sabía que estaba en problemas. Gracias a aquello, Mitch y Evan se ven forzados a trabajar juntos en una de las misiones más importantes. Y, ninguno de los dos es tonto, se han estudiado, saben como es el otro, han leído archivos y oído rumores. Eso les bastaba para no confiar el uno en el otro. Porque, a Mitch no le gustaban los terroristas, los mataba, y a Evan no le gustaba la gente como Mitchell Rapp.