E | "El jugador de vóley no es un solista, sino miembro de una orquesta".
Donde hay un chico nuevo, y Shimizu está presurosa a conseguir un aprendiz.
______________ es un chico con muchas particularidades, secretos y actitudes extrañas. Cuando ingresa como aprendiz de mánager al equipo masculino de vóley del Karasuno, todos, y él mismo, se sorprenden.
Pero lo cierto es que hizo muchos cambios.
Ya fuera porque no respondía cuando le preguntaban y solo dedicaba miradas cargadas de emociones y pensamientos, que siempre bastaban como respuesta, si es que no traía consigo su pizarrón.
O porque fundó un nuevo club.
O porque corregía posturas y técnicas, y murmuraba en voz muda esqueletos de estrategias para ellos; aunque nunca se le viera golpear una pelota si es que no era para huir.
O porque toda la escuela parecía tener un ojo encima suyo después de su ingreso:
"El chico que había repetido un año nunca dice nada, pero no es mudo".
También podía ser por esas sonrisas cortas, ese atisbo de ternura en sus ojos y su cuerpo pálido, la bruma de incógnitas a su alrededor, el color cambiante de su cabello, una simple seña, solo para ellos, el equipo de vóley del Karasuno: _____________ estaba surtiendo un efecto hipnotizante, lentamente, en cada uno de ellos como piezas de un rompecabezas que se armaba con el tiempo.
Pero aunque no supieran cual de todos era, cuando lo ven llegar y atravesar las puertas de la cancha, fuertemente arraigado a los audífonos más gruesos que hayan visto alguna vez, y sus pasos lentos y frases cortas, todo lo olvidaban.
Reían, saltaban, jugaban. Solo eran adolescentes confundidos, una mezcla de vóley y salidas en grupo.
Sin problemas, sin preocupaciones.
Y eran ellos, y _______________, contra el mundo.