3:30 de la madrugada y el aparecía por esa grande puerta, hasta donde estaba sentada con mi niña en brazos podía oler el horrible olor del licor que por venía de su boca, mi niña apenas lo ve y corre hacia el, el la carga y deja un beso en su mejilla, sube a la segunda planta de la casa con la niña me brazos, ni siquiera me miro o dijo un simple hola. Eso era lo me dolía, que no podía dirigirme la palabra por si torpe vergüenza a mi, pero vergüenza ¿A que? Lo he visto en peores momentos y oliendo peor a licor, suspire y me guarde mis comentarios para otra ocasión, subí a nuestra recamara y camine hacia mi cómoda cama y me acosté, tome una suave manta y la coloqué en mis piernas, suspire con pesadez y traté de dormir. . . . . Espero la disfruten como yo estoy disfrutando escribirla🥰