Después de morir en un accidente de tráfico al salvar a un niño pequeño, Kim Do-yoon despierta en el cuerpo de Ye Do-yoon, el hijo ilegítimo del presidente de un gran conglomerado. Aunque comparten el mismo nombre, la única conexión entre su anterior vida y la de Ye Do-yoon, que vivió una vida completamente diferente, es la universidad de la que se graduó y su cercano amigo junior, Han-gyeol. Desesperado, Do-yoon se acerca a Han-gyeol, pero este es muy diferente del encantador junior que recordaba.
"No sé si quieres algo de mí o solo quieres jugar conmigo... pero no uses a Do-yoon hyung para eso. Realmente podría matarte".
Soy Do-yoon, Gyeol-ah...
"Do-yoon hyung, ¿ya almorzaste?"
"Hyung, aunque no lo parezca, necesitas mucha atención".
"Espero que no te encuentres con personas que te traten mal".
La voz educada y amable de su junior parecía lejana, como una mentira. Do-yoon soltó una risa amarga mientras observaba la espalda de Han-gyeol alejándose tras decir lo que quería.
"Así que estabas fingiendo..."
Al defender a su familia de un asaltante y morir, Alicia es transmigrada a un mundo del matriarcado, donde las mujeres son el pilar y las que mantienen a la familia, mientras los hombres son los que se quedan en casa.
Lo más sorprendente para Alicia no es el sistema en el que se rige la sociedad, los hombres, que no solo son los que dan a luz, si no, que se dividen en dos.
Los oro, la clase baja que tienen tendencia a dar a luz a otros hombres.
Y los jade, la clase alta que tienen tendencia a dar a luz a mujeres.
No solo eso si no que al ser las mujeres un bajo porcentaje, las familias se conforman por un harem de hombres, los cuales no son vistos más que como máquinas de hacer bebés.
La imagen la saque de internet créditos de la imagen a: "Alya".