En el caótico mundo del rock, donde el exceso y la pasión eran moneda corriente, dos estrellas encontraron en su mutua atracción un deseo tan poderoso como prohibido. Nikki Sixx, el legendario bajista de Mötley Crüe, conocido por su vida de excesos y su carisma indomable, cruzó caminos con Saraya, la electrizante vocalista que lideraba su propia banda con una presencia que dejaba sin aliento .All Rights Reserved