Mí vida giraba en torno a mis estudios, a mis tardes sin ocio, a mis noches de desvelo mirando series sin sentido y con insomnio debido a mi terrible horario de sueño. Hasta que 𝙀𝙡 entro a mi vida sin avisar, todo cambio 𝙀𝙨𝙚 día. Recuerdo cuando tocó la puerta del señor Robert, mi vecino, cuya profesión era impartir clases particulares de Matemáticas.
Su llegada cambio mi norte, trastorno mis pensamientos y me transformó por completo, sacando a la luz una versión de mi que ni yo sabía que existía.
Su perfume parecía feromonas, era una droga para mí... No sé cómo sucedió, no sé porque lo hice, solo sé, que me empecé a interesar por 𝙀𝙡, quería saber su maldito nombre, quería 𝘾𝙤𝙣𝙤𝙘𝙚𝙧𝙡𝙤.
Sin notarlo, lo comencé a espiar sin que 𝙀𝙡 notara mi presencia y allí comenzó todo el caos. Fue demasiado tarde cuando quise detenerme, había perdido el control, todo de 𝙀𝙡 me llamaba, quería saber que pasaba por su mente, cuales eran sus inconfesables morbos y sus placeres culposos.
Yo ̶N̶e̶c̶e̶s̶i̶t̶a̶b̶a̶ ̶...No, Yo quería, sí, que el fuese mío. Absoluta y completamente Mío.
-No llores angel, ¿Quien te ha hecho tanto daño? -dice desde la sombras, la luz se ha apagado con el llanto del ángel.
-Aquel demonio -señala limpiando sus lágrimas-. Lo siento, debí tener más cuidado.
-El es quien debería tener más cuidado.
La sonrisa del diablo se ensancha, sabe que no hay nada que pueda impedir que lo haga sufrir, que torture a quien daño el ala de su ángel, quien astillo su dulce corazón.
No hagas llorar al ángel, no querrás obligar al diablo a salir del averno para ver la sonrisa de aquel angel que lo atormenta en sus sueños.
No querrán ver cómo los hace sufrir por separarlo de quién mantenía con luz el averno, que mantenía en cautiverio a la bestia.
El destino nos depara cosas inciertas, el camino puede ser largo y espinazo. Ten cuidado cuando hagas tropezar al ángel que te sigue y lo hagas llorar no querrás ver la venganza que tiene el diablo preparada para ti.