Santiago es un chico normal con una vida normal, pero él tiene un secreto... Está enamorado de su mejor amigo, Emiliano. Todos saben que están enamorados, menos ellos. Santiago disfraza su atracción como joteo, pero no puede ocultar la emoción que siente cuando pronuncia el cariñoso apodo que le puso a su crush: ¡Honey Boo-Boo! Siempre que se escucha ese grito afeminado, lleno de amor y admiración; toda la secundaria sabe inmediatamente que están a punto de presenciar el momento más homosexual de la historia, imposible de recrear incluso en las marchas del colectivo LGBTQ+. A Emiliano siempre le llegaban declaraciones de amor, pero un día decidió aceptar a una de las chicas que lo pretendían. Ese acto hirió a Santiago profundamente, pero al no saber que se trataba de celos, él supuso que solo estaba celoso de Emiliano por conseguir novia, así que empezó a buscar el amor desesperadamente... ¿Cuándo se enterarán de que el amor de sus vidas siempre estuvo más cerca de lo que creían? ¡Sigue leyendo para acompañar a nuestros protagonistas en su camino de autodescubrimiento! (Se cuenta con la autorización de utilizar la imágen de los sujetos reales para escribir esta historia. Se pide respeto por las personas y cabe aclarar que ningún apellido o nombre de la institución es real.)
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