Que complicado es el amor cuando no hay una fuerza superior en el universo que te señale a tu alma gemela. O cuando no puedes verla. Adeline está segura de que la Diosa Luna se ha olvidado de ella. Sin su loba, y sin pareja destinada, le cuesta encajar en un mundo en el que todo parece ir muy rápido, y ella parece quedarse atrás. Una manada sin heredero, un completo desconocido, una tempestad de problemas y una apuesta. ¿Sabrá verlo en medio de todo aquel desastre? ¿Podrá encontrarlo en medio de toda su oscuridad?