Estaba tan feliz por haberte superado, estaba decidida a empezar algo nuevo sin vos, salir de nuevo con mis amigas, volver a sonreír.
Me encantaba no estar celosa todo el día, no vivir poniéndome de mal humor. Cosas que vos me provocabas. Pensé que ya había terminado.
Era tan feliz con esa idea de que te había superado por fin, ya había borrado todas nuestras fotos y prometí que nunca mas iba a volver con vos. Pero la estúpida cayó de nuevo.
Te creí de nuevo y a pesar de que ya estaba con la idea de que NUNCA mas iba a creerte.. Lo hice.
Porque sabía que todavía había algo bueno de mi en vos, pensé que habías cambiado...
Incluso pensé que te habías dado cuenta de los errores que habías cometido. Te di una nueva oportunidad para comenzar de cero y te dije que iba a olvidar todo porque te quería y estaba demasiado enamorada de vos y CONFIÉ.
Dijiste que ibas a cambiar, que ibas a ser diferente y que me lo ibas a demostrar con acciones... Pero que paso?
Caí de nuevo en una de tus mentiras, todo lo que me decías era mentira y fui tan estúpida!
Descubri muchas cosas, y te odié y llore tanto. Pero yo fui la estúpida al creerte de nuevo, sabía que no tenia que hacerlo, pero bueno.
Te borre de mi vida, ahora si ya no quería saber nada de vos. Pero aprendí la lección, las personas como vos jamás van a cambiar y eso me alegra porque jamás vas a ser feliz... En cambio yo si y mucho!
Sólo un golpe más faltaba para darme cuenta de mi error, para poder ser más lista al momento de perdonar a alguien y sobre todo a quererme y valorarme
Asher pensaba que tenía una vida perfecta. Era el mejor en su equipo de hockey, tenía las mejores notas en la universidad y un grupo de amigos que parecían serle fiel.
Pero cuando conoce a Skye, la hermana de uno de sus mejores amigos cree que la chica está loca. Tiene una actitud tan dura que es difícil de romper y suele irritarlo todo el tiempo desde que se ha mudado a vivir con su hermano y él.
Y cuando los chicos del equipo le proponen que no conseguiría conquistar a alguien como Skye, lo ve como un reto que está dispuesto a jugar, una apuesta para conquistar el corazón de alguien como Skye es suficiente para que Asher acepte, pues es demasiado competitivo y no está dispuesto a perder su puesto en el equipo de hockey y pasarse el resto del año en la banca como le han apostado.
Sin embargo, a medida que conoce a Skye, Asher se da cuenta que la chica es todo lo contrario a lo que le ha tratado de demostrar, conquistarla no parece tan complicado como pensaba y el corazón de ella no parece ser el único en juego.