Cuando era pequeño y me dijeron que podía soñar, yo soñé con ser una mariposa que lleva en sus alas libertad y cuando vuela, llora, y cuando poliniza, sangra. Me dijeron que podía soñar y yo pensaba que volar y ser libre eran la misma cosa. Pero el perro negro que me mira en la oscuridad estranguló mi libertad con sus colmillos, saboreando en su saliva la mariposa muerta. © Azul PérezAll Rights Reserved