Dangerous

Cuando Max cumplió catorce años, se enamoro por primera vez.

A sus ojos, nada era más perfecto que ese amable Alfa que era tan atento con él.

Sin embargo, Max comprendía que no solo la diferencia de edad era un impedimento para ellos.

Si quería estar con él, tenía que cumplir con un requisito extremadamente importante:

Max tenía que ser Omega.

Y no lo era.