Tardé años en darme cuenta que cuando mi querida esposa partió se llevó consigo la mejor versión de mí, en su lugar dejando un viejo canas verdes que alguna vez contuvo un alma. El abandono de mis amados hijos me hizo sentir solitario, mis sentimientos vagos me hicieron recaer en la bebida hace un par de años, cuando finalmente en busca de un propósito encontré una cosa de extraña apariencia en mis sueños, su aspecto me aterra, la forma de sus facciones me eriza la piel, pero él es mi amigo. Ni siquiera sé si existe fuera de mi mente; por las noches me acompaña, me escucha, y finalmente me aconseja. A su lado siento compañía de vez en cuando aunque no sé ni quién es, de dónde viene, tampoco sé qué es lo que quiere. Aquél día me contó que toda y cada una de sus apariciones se acercaba a un propósito, pero que sin duda no es el mismo propósito que yo estaba buscando.
-Querida cosa, ¿hoy vendrás a verme?...
Nina García siempre ha soñado con volar. Después de años de esfuerzo y dedicación, logra graduarse como piloto y convertirse en primera oficial en una de las mejores aerolíneas de su país. Sin embargo, su sueño se convierte en pesadilla cuando conoce a la Capitán Alex, una mujer exigente y autoritaria que la pone a prueba desde el primer momento.
La tensión entre ellas es palpable, y su relación se vuelve cada vez más complicada. Alex ve a Nina como una piloto inexperta y demasiado joven, mientras que Nina considera a Alex una tirana que no sabe valorar el talento de sus colegas.
A medida que trabajan juntas, sus diferencias personales y profesionales se intensifican, pero también comienzan a surgir sentimientos que ninguna de las dos puede ignorar. Sin embargo, su relación está condenada desde el principio: las familias de ambas mujeres se oponen firmemente a la relación, y la política de la aerolínea prohíbe las relaciones entre colegas.
¿Podrán Nina y Alex superar sus diferencias y encontrar el amor en el cielo, o será su relación un accidente inevitable?