Thomas siempre a sido un joven curioso, desde que tenía memoria, su fascinación por las criaturas fantásticas lo ha llevado a explorar bosques oscuros y cuevas profundas, siempre en busca de nuevas aventuras y conocimientos, su pasión por los monstruos y bestias no era bien comprendida por sus vecinos, quienes preferían mantenerse alejados de lo desconocido.
A los doce años, Thomas encontró su primer libro sobre criptozoología en la biblioteca del pueblo, un volumen antiguo y polvoriento que detallaba las costumbres y comportamientos de criaturas legendarias.
Desde ese momento, dedicó cada minuto libre a estudiar y observar el entorno, tomando notas detalladas de sus hallazgos en un cuaderno de tapas de cuero que siempre llevaba consigo.
Ahora con sus dieciséis su conocimiento había superado con creces al de cualquier experto local.
Había catalogado especies desconocidas, aprendido sobre sus patrones de alimentación y descubierto comportamientos nunca antes documentados.
Sus descubrimientos lo llevaron a ser reconocido en círculos académicos, aunque su verdadera motivación siempre fue la simple maravilla de comprender lo que otros temían.
Lo que no esperaba es que una expedición lo llevará a un mundo completamente diferente.
Ya estoy hasta la madre de escribir tantas historias sin terminar, pero aquí vamos de nuevo...
Donde un Draco Malfoy tiene autismo, fue abandonado por su madre y se hizo mejor amigo de Harry Potter antes que el trío de oro.
hay una serpiente blanca, un lobo negro y un diario.
Ah, y los fundadores lo ven como la cosa más linda del mundo.